À procura de textos e pretextos, e dos seus contextos.

20/07/2009

Grecia planea nuevos centros para encerrar a los inmigrantes sin papeles

La mañana del 12 de junio las autoridades griegas limpiaron y allanaron un campamento en la ciudad portuaria de Patras ocupado por cientos de inmigrantes en situación ilegal procedentes de Afganistán. Mientras las máquinas excavadoras aplastaban las rudimentarias casas y se declaraba un incendio, la policía antidisturbios detenía a docenas de personas que todavía no habían huido de la zona.

La demolición del campamento, en donde muchos afganos vivían mientras esperaban embarcarse rumbo a Italia, es un ejemplo de la nueva política contra la inmigración ilegal que está aplicando el gobierno de centroderecha griego y que ha despertado inquietud entre los grupos de derechos humanos.

Abrumadas por el problema, las autoridades planifican construir nuevos centros de detención para confinar a los indocumentados. Además, una nueva legislación aprobada por trámite de urgencia en el parlamento a finales de junio aumenta de tres a seis meses el tiempo que pueden permanecer detenidos en Grecia. Bajo determinadas circunstancias, ese tiempo se podrá extender otros 12 meses.

El gobierno griego ha señalado que algunos de los nuevos centros de detención que acogerán a los inmigrantes se crearán en antiguas bases militares. Según la prensa nacional, la primera de estas instalaciones podría estar terminada hacia finales de julio, y lo más probable es que estará situada lejos de zonas residenciales.

Ausencia de derechos básicos

Pero los grupos de defensa de los derechos humanos y los partidos de la oposición aseguran que la encarcelación no es el modo más adecuado de manejar la crisis de la inmigración. Las actuales instalaciones de detención de ilegales que hay en Grecia han sido reiteradamente criticadas por las Naciones Unidas y por tribunales europeos por no garantizar los derechos humanos básicos. Los detractores de los centros aseguran además que las nuevas regulaciones dificultan el acceso a sus derechos a quienes buscan acceso legítimamente.

“La solución no es tener más y más centros de detención. Eso no soluciona el problema de los inmigrantes o lo refugiados”, asegura Georgia Trismpioti, directora de la rama griega de Amnistía Internacional. “No han cometido ningún crimen. Su único ‘crimen’, por así decirlo, es entrar en otro país buscando asilo político o unas mejores condiciones de vida”.

Un reciente informe del Consejo de Europa basado en visitas realizadas durante 2008 a diferentes centros de detención indica que pese a haberse detectado ciertos avances, las condiciones de las instalaciones griegas siguen siendo inaceptables y que los inmigrantes corren “un riesgo considerable” de no recibir los tratos correctos.

“Los centros de detención en las islas del Mar Egeo, en Samos, por ejemplo, o en Evros, que está cerca de Turquía, en donde se retiene a muchos peticionarios de asilo, tienen unas condiciones deplorables”, asegura Georgia Trismpioti.

Pero el partido en el gobierno siente presión para demostrar que toma medidas al respecto, herido por la reciente derrota en las elecciones la Parlamento Europeo, en las que la extrema derecha griega logró importantes avances gracias a su énfasis en asuntos relacionados con la inmigración.

Mayor flujo de inmigrantes

En los últimos años Grecia ha experimentado un ingente aumento de la inmigración ilegal y de las peticiones de asilo. Cada vez son más las personas de África, Asia y Oriente Medio que llegan al país a través de sus costas o por su frontera con Turquía. El gobierno dice que es incapaz de asumir este flujo cada vez mayor. El año pasado casi 150.000 inmigrantes fueron arrestados en Grecia. En lo que va de 2009 las cifras parecen ser menores.

El gobierno reaccionó tarde al problema, pero últimamente ha empezado a incrementar sus esfuerzos diplomáticos para forzar a otros países de la UE a que compartan el problema y que obliguen a Turquía a cumplir acuerdos de repatriación.

Las medidas gubernamentales se producen también como respuesta al temor de que esté aumentando el número de inmigrantes indigentes que delinquen y a las protestas registradas recientemente en el centro de Atenas cuando inmigrantes musulmanes acusaron a un agente de policía de profanar un Corán.

La ministra de Asuntos Exteriores griega, Dora Bakoyannis, ha reconocido algunos problemas en la respuesta de su país a los asuntos relacionados con la inmigración, pero ha negado que se maltrate a inmigrantes y refugiados. No obstante, asegura que Grecia necesita ayuda de la UE para afrontar el problema. “Para poder manejar esta situación Grecia necesita la solidaridad europea”, afirma. “No se puede acusar a Grecia de tener una política inhumana hacia los derechos de cualquier persona”.

La nueva legislación de Grecia se enmarca dentro de una creciente tendencia en la UE a usar centros de detención prolongada como medida para afrontar la inmigración ilegal. Italia ha aprobado recientemente una legislación que criminaliza a los inmigrantes ilegales y aumenta a seis meses el tiempo que pueden permanecer detenidos.

lainformacion - 20.07.09

Sem comentários:

Related Posts with Thumbnails