El ministro portavoz, Hirofumi Hirano, ha calificado de "asunto personal" el incidente, y la oficina de Hatoyama ha declarado que "hubo una equivocación" pero que "lo hemos solucionado y ya hemos pagado los impuestos".
El primer ministro de Japón, investido en septiembre pasado, es millonario. Su abuelo fue el fundador de la empresa fabricante de neumáticos Bridgestone, de la que posee unos 3,5 millones de acciones en herencia. La cantidad que Hatoyama no declaró al fisco la obtuvo por la venta de más de 150.000 acciones de diez empresas distintas en 2008.
No es el primer problema del primer ministro, que se ha visto relacionado recientemente con un escándalo de donaciones relacionadas con un fondo de financiación política. Un grupo de ciudadanos presentó en julio una denuncia al asegurar que en las listas de donantes del fondo, llamado Yuai Seikei Konwa-kai (Asociación Fraternal de Política y Economía), figuraban decenas de indentidades falsas, entre ellas las de algunos difuntos.
Hatoyama admitió en junio que había datos falsos en las listas de donaciones entre 2005 y 2008 que afectarían a una cantidad de 21,77 millones de yenes (164.073). Pero responsabilizó de los falsos informes a su ex contable, y aseguró que el dinero procedía únicamente de su fondo personal, algo que los fiscales están investigando. Las donaciones individuales a Yuai Seikei Konwa-kai ascendieron desde 2003 hasta 2008 a cerca de 250 millones de yenes (1,88 millones de euros).
El País - 02.11.09
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